jueves, 24 de enero de 2019

DE AMAPOLAS Y RAYOS




Los inviernos siguen haciendo mella, 
al igual que los ladrones de guante blanco 
que roban besos a la luna roja.
Su alma baila sola,
pero su boca,
esa si 
que sabe a amapolas y rayos.
No es casualidad, 
sino una perrería del destino 
que se obstina con jugar 
a la ruleta rusa a oscuras,
mientras pierde el sentido.
Así que si quieres echarle la culpa
a alguien,
que sea a él 
y no a su aroma.
Si eso pregunta a Ulises, 
que no la escuchó 
pero la vio desnuda 
mientras le hizo creer  moría.
En definitiva
el frío se ausentó por siete segundos,
infinitos si,
o al menos eso les pareció a sus labios
que juzgaron y perecieron a la vez.
La noche no suele dejarse probar a menudo, 
para eso existen los eclipses
que tientan a los sentidos 
a ser permisivos mientras dure.
Si,
mientras dure el invierno 
y luego ya verás
como al final,
antes de enamorarse 
te olvida,
o al menos es lo que
te hará creer.


Autora: Mariana Regueiro. Ariel 

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De amapolas y rayos by Mariana Regueiro. Ariel is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.
Creado a partir de la obra en https://vuelvoamimar.blogspot.com/2019/01/de-amapolas-y-rayos.html.

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