Sobre cuentos de una cripta
yacía de nuestra historia
un epitafio,
y en la lápida decía:
“En este petate descansa un desgraciado”.
Era tan flaco mi querido amado
que lucía todo desgarbado,
sus huesos le chirriaban
cuando íbamos de la mano.
Ay … si es como si lo estuviera viendo …
como ánima perdida siempre entre sus trapos,
pero así y todo yo lo quería,
a mi saco de huesos mimado.
Y aunque no me lo crean
era apuesto el condenado,
tanto así que una tarde le cayó el lazo
con la catrina que pasaba a su lado.
Sabe Dios en que momento
de mi flaco se ha enamorado
o si fue encantamiento
entre tanto hueso asimilado.
De quejarse no podría mi pobre finado,
ya que con la parca me batí a duelo
y en el inframundo
con sus greñas me quedé en la mano.
Pero pese a este amor eterno
ella se lo llevó caminando,
y en un altar de muerto
me dejó un pan de
huesos
para que por siempre pueda recordarlo.
Lo que nunca se
imaginó la vieja ladina,
que una vez comido el pan
con solo el crujir de mis labios,
vestida y sin muerto
la dejaría
y yo al altar con el difuntito de mi brazo.
Autora: Ariel
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Creado a partir de la obra en
http://mardepoesia.ning.com/grupos/poesia-gotica/forum/por-tus-huesos-calaverita-certamen.
Esta es la sátira de una historia verídica, aunque la parca
bien me dio lo suyo yo salí ganando .
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